Abrimos la cartera y en ella encontramos tal oferta de tarjetas que a la hora de pagar nos resulta difícil decidirnos por una, al fin y al cabo todas son plástico y descuentan el dinero de nuestra nómina. Una vez más el marketing se pone al servicio de los bancos para ofrecer a los clientes un elemento diferenciador o un valor añadido. Tarjetas con descuentos in situ , puntos acumulados canjeables por viajes, entradas de cine y otros eventos, porcentajes de descuento a final de mes o de año…

Un sinfín de ofertas que hacen que el consumidor se decante por una u otra. La nueva tendencia de marketing es el Co-branding, ya que gran número de españoles se decanta por las tarjetas asociadas a los supermercados, gasolineras, tiendas de moda… Desde este foro de marketing vemos acertada la estrategia tanto para la banca, que puede perfilar su oferta a través del público objetivo que desea, como para el cliente que aunque tiene que pagar se ve recompensado de alguna manera.