¿Qué ocurre para qué existan pocas mujeres liderando startups digitales? ¿Por qué no se lanzan a este tipo de negocios si disponen de las habilidades y la formación para ello?

En una radiografía de este tipo de negocio, un estudio de Spain Startup revela que el perfil estartapero en España es un hombre, de entre 25 y 34 años, con título universitario y estudios de posgrado, además de experiencia laboral por cuenta ajena y sed emprendedora.

Por el contrario las mujeres, suelen formar parte de la creación y nacimiento de startups de éxito, “pero no son muchas las que asomar en el nivel de primer ejecutivo”, asevera Clara Jiménez, directora de Innovación de Accenture, quien además argumenta este hecho aduciendo que las mujeres prefieren centrarse en aquellos conocimientos en los que se sienten seguras y ceden el testigo del riesgo emprendedor a los hombres. “Por su forma de ser, a una mujer le gusta el orden, y ellos se sienten cómodos en el caos”, justifica.

Quizás por ese temor hacia el territorio inexplorado, a las mujeres les cueste más lanzarse a liderar startups, “para ello se requiere sobre todo de confianza y de negación del fracaso, además de capacidad para asumir riegos”, expresa Alberto Knapp, fundador de The Cocktail.

Existen pocos referentes femeninos al frente de este tipo de empresas. Así lo pone de manifiesto Carlota Mateos, fundadora de Rusticae que ha estrenado recientemente el catering ecológico a domicilio PlenEat. “Solo he visto a una mujer de 39 años decir que quería convertir su startup de energía en la primera unicornio de España”, insiste Mateos, refiriéndose a Carlota Pi, fundadora y consejera delegada de la comercializadora de electricidad Hola-luz.

La manera revolucionaria de Pi de entender la relación con el cliente de las compañías eléctricas, la llevó a emprender de la mano de dos hombres: Oriol Vila y Ferrán Nogué. Su bandera ha sido no tener miedo al fracaso y ante todo perseverancia.

A pesar de que Carlota Pi puede ser una “rara avis” en el universo estartapero, también Carlota Mateos está alineada con la idea de derrocar mitos en las ansias de emprendimiento de las mujeres. Después de dos décadas al frente de un proyecto como Rusticae se lanzó a montar PlenEat “y acabo de levantar una ronda de financiación de 400.000 euros”, de ahí que Pi deseche la idea de de que los inversores no crean en las mujeres.

En las antípodas de esta idea está María Gómez del Pozuelo, consejera delegada de Womenalia –red de muejres profesionales que tiene adscritas a 500.000 personas- que aporta el dato de que solo el 36% del mercado emprendedor corresponde a mujeres y de este entorno, tan solo el 8% pertenecen a startups tecnológicas.

De igual modo, la directora de innovación de Accenture achaca a la educación buena parte de esta problemática. Esgrime que no solo es necesaria la familiarización con las áreas tecnológicas, sino que también se requiere de una formación que haga pensar a las mujeres que pueden llegar a lo más alto, tal y como lo hace el hombre.

El fundador de The Cocktail, Alberto Knapp augura un escenario en el futuro con las mimas complicaciones pero con algunos halos de luz que favorecerán el desarrollo de empresas unicornio lideradas por mujeres. A ello contribuirá la diversificación, la necesidad de otro tipo de liderazgo y la maduración del contexto digital.

Fuente: foromarketing.com