Hola a todos,

os dejo un extracto de un artículo que escribí defendiendo el street marketing y las nuevas formas de comunicación como algo que se convierte en imprescindible para una marca que quiera sobrevivir en la actualidad. Quería conocer vuestras opiniones al respecto. Os dejo mi blog sobre street marketing y arte callejero por si queréis visitarlo o participar: www.observatoriocallejero.com

DÍMELO EN LA CALLE

Y dímelo de una forma diferente. Eso es lo que está pidiendo a gritos el consumidor. Claro que las marcas tienen mucha presencia en las calles pero esa invasión mediante vallas, mupis, opis y el resto de miembros del ejército de monstruosidades no sólo ha perdido efectividad sino que empieza a molestar a la ciudadanía. En Madrid, no hace mucho, el Ayuntamiento colocó un circuito de giga-mupis que no sólo no respeta la arquitectura urbana sino que tampoco a sus ciudadanos, a sus consumidores, en definitiva, al público objetivo de esas campañas. ¿Realmente las marcas que se anuncien en estos nuevos soportes van a conseguir ser atractivas para su público o por el contrario corren el peligro de sufrir rechazo por formar parte de esa invasión?

Es obvio que las marcas, y todas las personas que hay detrás de ellas, son conscientes de la necesidad de saber leer a sus consumidores y que, estos, cada día tienen más poder frente a ellas. Por eso, tienen que sorprenderles no sólo en el mensaje sino también en la forma. El anunciante y la agencia tienen que abrir los ojos y apostar por la calle como canal de comunicación. Atreverse a ser originales, arriesgarse a innovar. Formatos nuevos que se adapten a cada ciudad, a cada barrio e incluso a cada calle. Mensajes que sólo tienen sentido en ese entorno. Una alcantarilla, una farola, un vagón de metro e incluso una persona pueden ser el lugar ideal para que una marca llegue de una forma memorable a su público, de una forma que jamás lo conseguiría a través de un spot o una gráfica.

No quiere decir que tengamos que prescindir de nuestras campañas ATL y BTL, pero sí que debemos replantearnos que hay públicos nuevos, jóvenes y segmentados a los que no se les puede alcanzar de la manera a la que estábamos acostumbrados. Nuevas personas, nuevos canales. Esto requiere una forma de comunicación diferente que debe ser flexible, actual y muy sorprendente. Exige que las marcas vivan el día a día junto a sus consumidores y, a cambio, ellos les enseñarán que es lo que hacen cada día, que les motiva, que es lo que hoy les gusta pero mañana no.

Saca tu marca del televisor, no es lo mismo un spot de 20 segundos rodado en la calle que hacer, durante 20 segundos, de la calle un spot. ¡Ojo!, las dos cosas funcionan pero la segunda cada vez se hace más imprescindible.

Viva la calle!