«La libertad es el lujo que no todos pueden permitirse»

Otto von Bismarck (1815-1898)
Político, estadísta, burócrata
y militar alemán

En mi época de adolescente en el instituto unos compañeros de estudios me contaban que iban a Mónaco para ver el famoso Rally de Montecarlo. Desde siempre, con sólo escuchar nombrar el Principado, empezaba a fantasear en mi imaginación. Ha pasado el tiempo, ahora organizo eventos de networking profesional, uno de ellos llamado MONTECARLO «6 Degrees» Networking & Business. Como siempre los eventos tienen el nombre de la ciudad y se desarrollan en el idioma en que se realiza, en este caso una combinación de francés e inglés. Además, ahora, después de visitarlo en muchas ocasiones, han surgido no sólo contactos profesionales, también muy buenas amistades.

Rememoro con cariño y agradezco a mi abuelo Antonio, después de las comidas, durante el «après-midi», sus conversaciones en francés conmigo. Siempre dedicado, constante y cariñoso. Él lo aprendió en los años de la posguerra en Francia y tenía un acento extraordinario, prácticamente podía pasar por ciudadano francés. En la actualidad, cada vez que lo hablo lo recuerdo, es como si lo tuviera al lado mío, muy cerca de mí. Como bien me decía: «Antoine, nous sommes citoyens du monde» (Antonio, nosotros somos ciudadanos del mundo). Claro que sí. Por supuesto, la formación en diferentes lenguas es primordial.

Gracias a la tecnología he conocido a personas que viven en Mónaco, como Christophe Larini, monegasco de nacimiento, con quien tuve la ocasión de tratar primero virtualmente, gracias a las redes on-line, en este caso Facebook, a quién después de unas cuantas conversaciones y visitas a esta población única y sublime, he tenido oportunidad de conocer en persona.

Christophe trabaja para los servicios sociales de la administración monegasca. Es un hombre de aspecto serio y educado, por su profesión muy bien conectado. Es el tipo de persona que pasa desapercibido para la gran mayoría, sin hacer ruido. Sin embargo es el primer grado para infinidad de accesos a firmas relevantes y personas notables de dicha comunidad.

Durante una charla, le pregunto qué es para él el networking y en cuál está más cómodo, si prefiere el virtual o el presencial; Christophe me responde:

«Los dos son importantes, el virtual es para mí el primer paso antes de construir sólidas relaciones entre las personas, después, en el presencial. Es estupendo gracias a las redes sociales que han ayudado especialmente a las conexiones».

Recibo una llamada de una buena amiga. Sabedora de mi interés por este territorio, me telefonea para informarme de la emisión de un programa de televisión llamado Españoles en el mundo, donde entrevistan a diferentes compatriotas repartidos por todo el mundo para conocer de primera mano cuáles han sido sus experiencias personales en la adaptación a su nueva metrópoli amenizadas con algunas anécdotas. Veo el reportaje de estos conciudadanos que viven allí, me anoto los nombres y conecto con todos ellos mediante diferentes redes. La mayoría responden a mi petición de contacto, otros la ignoran y con algunos de ellos acuerdo conocerlos en persona en mi visita.

Entre las diferentes historias, me llama la atención el testimonio de unos hermanos con diferentes negocios relacionados con la venta de antigüedades. Ellos son Víctor, Daniel y Walter Wolkowicz, en ese orden de mayor a menor, respectivamente. De mi última visita tengo el listín de teléfonos que me ha facilitado mi amigo Christophe y en él busco la dirección de Víctor. Al llegar a la dirección que localizo en la página web de Víctor, el negocio está cerrado. Hay una nota que indica el cierre del establecimiento por un viaje, indicando otra dirección en la misma calle para encargos urgentes. Ha viajado hasta Israel en viaje personal y profesional.

Me dirijo a la dirección señalada, que es el negocio de su hermano Daniel. Me presento y le explico que organizo un evento de networking al mismo tiempo que recopilo anécdotas para el libro que voy a escribir, lo que le parece una idea excelente. Daniel es un profesional de artículos de lujo, muy amable, me propone ir a cenar esa misma noche, continuando la conversación, ya que está pendiente de unos pedidos urgentes para unos clientes rusos. Casualmente mi hotel está ubicado a dos minutos a pie de su comercio. Genial, parece ser que todo fluye.

Nos reunimos para cenar en el puerto, al lado mismo del circuito donde se celebra la famosa carrera de automóviles F1. Cenamos tranquilamente, ya que tiene muchos compromisos en la agenda y lo mejor es charlar comiendo.

Descubrimos que tenemos cosas en común, desde los gustos por el entrenamiento, el vino, los viajes y los idiomas; en este caso el vínculo principal es el idioma ruso y un viaje programado en unos meses para conseguir unas piezas exclusivas. Concluimos temprano. Al día siguiente, de regreso de una reunión, me acerco a saludar al volver a mi hotel. Justamente se está comunicando con su hermano menor. Daniel le dice quién soy, nos presenta por la webcam y después de saludarnos le pregunto si es posible que le visite. Walter responde que es un buen momento. En unos minutos me dirijo para allá.

Walter tiene un negocio localizado en el puerto de Fontvieille. Después de enseñarme su negocio y varios artículos curiosos y peculiares que tuve ocasión de ver en el programa de televisión y de una charla, me comenta que al día siguiente se levanta muy temprano porque forma parte de la tripulación en la embarcación del Príncipe Alberto de Mónaco y tienen programada una salida día siguiente, compromiso ineludible. Además, me entero en esta conversación de que su familia tiene una casa en la célebre localidad de Cadaqués a escasos kilómetros de donde vivo.

Lástima de no llegar a conocer personalmente a Víctor, personaje principal de la entrevista en el programa. Vuelve justamente el mismo día que regreso. ¡Queda pendiente para el próximo viaje al Principado!

Conecto con Bernard Marquet, miembro del gobierno del Principado con quien me entrevisto en el famoso Café de París, al lado del Casino de Montecarlo. Acordamos vernos para desayunar, muy temprano. Son las 8 de la mañana, todavía está pasando el equipo de jardineros encargados del mantenimiento de la plaza. Somos los únicos en toda la terraza al lado del Casino y enfrente del esplendoroso Hotel de París.

Conocí a Bernard gracias a la red social Facebook. De entrada podría parecer que al ser social, es sólo para flirtear o de entretenimiento, sin embargo yo realizo una labor de investigación de perfiles. De profesión es cirujano dentista, especialista en buco-dental, pero desempeña la función de vice-presidente del Consejo Nacional de Mónaco (Parlamento) y presidente del subcomité de la Cámara Social del Consejo de Europa. Me invita a una red privada de acceso limitado a nivel mundial. Quieren que sea muy exclusiva, prefieren pocos y activos miembros. Los orígenes de Marquet son italianos, fechan de cuando el Papa se desplazó de la ciudad italiana de Florencia a Avignon, población donde se encuentra parte de mi familia por parte de mi abuelo. Así tenemos ocasión de comentar el vino de la región popular en toda Francia.

En uno de mis viajes a Mónaco conozco a Nonnye, ella es norteamericana, concretamente de Chicago, trabaja como consultora para la prestigiosa firma internacional líder en consultoría PriceWaterHouse & Cooper en Londres y ha venido a pasar unos días de vacaciones. Viaje relámpago con una amiga en vuelo low-cost de 3-4 días. Visita rápida. Algo así como visitan los americanos Europa, 15 países en dos semanas. Ella es de origen nigeriano, está fascinada por conocer, su estancia en el viejo continente es limitada y quiere aprovechar para estar al corriente del famoso glamour del Principado. Tras una breve charla sobre el networking y cómo le ha proporcionado diversas promociones en su carrera profesional, me invita en mi próximo desplazamiento a ver la sede central de sus espectaculares oficinas en Londres. Así lo hago. Le envío un mensaje privado por e-mail y acordamos vernos.

Me gusta la recepción en el edificio de la reputada consultora: «Are you investing in relatioships?» (¿Está invirtiendo en relaciones?). Parece muy prometedor, ¿verdad? Tomamos un café y me propone asistir a la inauguración del hogar de unos amigos de origen polaco que se han trasladado de residencia y organizan una fiesta para celebrarlo. Accedo a su amable invitación, allí conozco a Renata que tuvo una relación con un sudamericano y habla español perfectamente. 1.º, 2.º, 3.º…¡Conectados!

En la averiguación de nuevos contactos conocí a Fabio Roccatagliata en ASmallWorld. Es administrador de sistemas para una multinacional del sector náutico. Ha vivido en Italia, Alemania y Francia y ahora trabaja en Mónaco, desplazándose desde la ciudad vecina de Génova. Le comunico que tengo previsto visitar Mónaco y que pienso organizar un evento de networking para conectar a expatriados y mentes globales. Le parece una idea fantástica.

Él pasa rápidamente a la acción, me comenta que tiene un contacto llamado Mario Vaccaro que es un networker natural impresionante. Es de origen italiano, acostumbrado a viajar y a conectar de manera innata a todo tipo de personas. Fabio dice que nos vinculará, ya que piensa que puede ser muy positivo. Mario organiza fiestas privadas muy elegantes y al más alto nivel y está muy bien conectado en todo el mundo. Veo que Fabio tiene una visión muy amplia y abierta de lo que significa el networking.

Estamos de suerte ya que en estas fechas el Sr. Vaccaro organiza una cena-fiesta en Roquebrune, en un restaurante al lado del mar con vistas idílicas. Fabio no podrá asistir por la noche, ya que por compromisos laborales ha tenido que desplazarse a Italia, pero me asegura que asistirá a una próxima edición del evento y así desvirtualizarnos. La verdad es que todos los amantes del mundo del automóvil me entenderán bien cuando digo que me hubiera quedado admirando toda aquella tecnología y belleza en el parking del restaurante. Mantuve el contacto con el organizador gracias a Mario, fue él quien me invitó a Decayenne.

Alex Pirard es diseñador de embarcaciones de lujo, afincado en Barcelona, y con motivo del Salón náutico de Cannes se registra en la convocatoria del evento previsto en esta ocasión en el hotel Le Meridien. Conocí a Alex hace años en un casting de un programa de televisión sobre emprendedores. Mientras esperábamos nuestro turno aproveché para presentarme y empezamos a hablar de cuáles eran nuestros proyectos para el programa al que nos presentábamos. Hubo buena química desde el principio. Allí ya nos intercambiamos las tarjetas personales y mediante las redes profesionales hemos seguido manteniendo el contacto.

Él ha ganado diversos premios de diseño de barcos de lujo espectaculares y está pasando unos días en la Costa Azul con motivo de la feria de barcos anual en Cannes. Nos invita al evento, donde se encuentran embarcaciones fastuosas espectaculares a Marc, que me acompaña en este viaje, y a mí. Les invito a ambos a asistir. ¡todavía puedo ver sus caras de sorpresa por el nivel espectacular de la fiestas! Grazzie mille, Fabio y Mario.

Hervé y Maxi son el encargado y el aparcacoches del hotel Montecarlo Bay, ubicado en la Avenida Princesa Grace, lugar donde se hospeda uno de mis admirados, el campeón español de tenis Rafa Nadal. El gran campeón número 1 mundial está disputando el torneo Masters de Mónaco. Tengo una amiga virtual que trabaja en el hotel Montecarlo Bay y me informa, tras una conversación mediante el chat, que es donde se hospeda Rafa. La verdad es que me hace ilusión tener la ocasión de saludarlo. Le dejo una nota en la recepción del hotel, deseándole éxito en el campeonato y agradeciéndole su garra y esfuerzo.

Pregunto a los encargados de los vehículos y de la recepción y me facilitan el lugar donde cenará. Justamente tengo reservado mesa en Zelo’s. La sorpresa es grande cuando tengo cenando a tres metros a mi ídolo. Tiene una cena con amigos, no parece un buen momento, mi compañero opina que tendré otra ocasión de conocerlo con seguridad en el futuro. Esa edición del Masters también es para él. ¡Felicidades Rafa!

Conectando con algunos contactos previamente al evento, mediante la red profesional Xing, me comunico con Sabine Holz-Strautmann, de origen alemán, directora adjunta de desarrollo de negocios del Dresdner Bank Mónaco, filial de la banca alemana Dresdner Bank, uno de los tres bancos más importantes de toda Alemania. Ha desarrollado principalmente su carrera vinculada al mismo sector y siempre en la misma empresa. Ha trabajado en diferentes países y sabe de la importancia de tener y gestionar la red de contactos. Cuando conecto con ella, rápidamente responde positivamente. Nos reunimos en el centro comercial Metropole de Mónaco, delante de los jardines del Casino, para comentar el primer evento que organizábamos allí.

Cenando en el Hotel de París, en el restaurante Le Grill del 8ème Etàge, todo es elegante, glamuroso y exquisito. El ambiente es muy refinado y los precios son acordes, elevados para la mayoría de los bolsillos, sin embargo pienso que estas ocasiones se dan una vez en la vida. El maitre de origen árabe habla perfectamente en varios idiomas. Me dirijo a él en francés y pregunto por la posibilidad de gestionar para más tarde nuestro acceso a la famosa discoteca Jimmy’z, propiedad de la Société Bains de Mer. Solicita el nombre de mi acompañante y el mío y en unos minutos regresa para comunicarnos que nuestros nombres están en la lista de invitados de la entrada del club.

Al salir del restaurante, es de libro visitar el mítico y fabuloso Casino de Montecarlo. Es fascinante la sensación de ostentación, cómo se respira en el ambiente. Mi amigo aprovecha para jugar un poco. A la salida nos cruzamos con uno de los personajes de primer nivel mundial del mundo de la música, el Sr. Paul David Hewson, quizás, o lo más probable, esto no te diga gran cosa, sin embargo es más conocido por Bono, vocalista del internacionalmente sonado grupo de música pop U2. Aunque no parece apropiado pedirle una fotografía (no por ganas de hacerlo), entra acompañado de dos parejas. Bono es dueño de una propiedad en la villa de Eze a escasos kilómetros de allí.

Continuamos la velada visitando la terraza de Zebra’s ahora convertido en Zelo’s, propiedad de un antiguo presentador de TV italiano, para acabar en el punto por excelencia en la noche monegasca, la discoteca Jimmy’z. La velada ha sido fantástica, pero mi sorpresa es mayúscula a las cinco de la mañana al esperar en la salida con el billete para la recogida de mi vehículo. Al girarme tengo a mi lado esperando a Bono. Esta ocasión no se me escapa. Lástima que mi compañero se pone un poco nervioso y la fotografía no es de gran calidad.

Localizo a Lorenzo Turco, un italiano que conozco gracias a la red profesional Xing. Hace años, trabajando para una empresa multinacional, gané un premio con mi equipo y nos hicieron entrega del mismo a diferentes miembros en el impactante Fórum Grimaldi. Creo una alerta de búsqueda automática en la red Xing para localizar a personas que tienen referencias en sus perfiles. Allí mismo se da cita un histórico y lujoso evento, el Salón de coches de lujo, Top Marques, acto que se celebra anualmente. Hablo con Lorenzo y vemos que posibilidades hay. De momento, mi visita me proporciona varios contactos interesantes, propietarios de negocios con quien en un futuro colaborar.

Dando un paseo en coche por el Principado veo el rótulo de una tienda en una avenida llamada Salvador Dalí. Es una galería de arte, una especie de museo focalizado en la figura y la vida del artista internacional catalán. El propietario es Jordi Casals, un parisino hijo de españoles que tiene la colección de fotografías inéditas más importante y numerosa del mundo del reconocido artista. Jordi es un superconector natural, de carácter afable, simpático, expresivo y muy extrovertido. Tiene fotografías con muchas personalidades junto a su obra, de la fama y del prestigio mundial de Michael Jackson, James Brown, Tina Turner, del mundo de la música, y con actores del calibre de Sylvester Stallone, Jean-Claude Van Damme, etc. Por supuesto posee la foto de rigor con su alteza el Príncipe Alberto de Mónaco.

Ha escrito el libro «Salvador Dalí en Montecarlo», con una colección de más de 300 fotos inéditas y surrealistas, un álbum histórico de fotos que recorre la historia y vida del maestro catalán principalmente en su estancia en Mónaco y con motivo del 100 aniversario del nacimiento del artista. Aparqué el coche y entré en su negocio. Jordi tiene un espacio con unos sofás para recibir visitas, de forma que los críticos de arte que frecuentan su negocio puedan sentirse cómodos. En ese mismo momento tiene a unos críticos de arte americanos emocionados por el Cristo de Dalí de 3 metros en la entrada.

Jordi me da la bienvenida y me invita a revisar algunos libros de fotografías de su impresionante colección. Su sorpresa es enorme al ver que llevo el crucifijo de Salvador Dalí, regalo especial de mi abuela materna Encarna. Automáticamente Jordi sonríe y me pregunta:

• ¿Eres catalán?
• Sí, soy catalán, concretamente de Girona, la misma provincia de la que procede el gran maestro Salvador Dalí.
• ¿Sabías que el maestro decía que todo catalán es un maestro de orquesta?
• Muchas gracias, le respondo y no puedo evitar sonreírle.

Rápidamente nos avenimos, me invita a beber un refresco y a enseñarme su obra, ya que está creando un estilo personal. Tenemos una divertida conversación y, al finalizar, me regala y dedica su libro. À la prochain!